Los superdeportivos toman Santander

En el año 2008, el santanderino Jesús Solano, un apasionado de los coches, decidió organizar un evento de superdeportivos en el Palacio de la Magdalena al que asistieron 52 participantes. En aquel momento, no se imaginó que esa iniciativa creciera hasta el punto de cumplir 18 ediciones y reunir unos 180 vehículos. «Este evento (Supercars' Drivers Community) lo organizo por el cariño que tengo a Santander», apuntaba este sábado, durante la concentración de superdeportivos que se celebró en el Parque de Las Llamas, al que acudieron decenas de personas para disfrutar de unos coches que pocos se pueden permitir por su valor y para llevarse una fotografía para el recuerdo.

MG, Porches, Maseratis, BMW, Lamborghini, 33 McLaren procedentes de Inglaterra... y algún que otro clásico, ya que el evento no cierra la puerta a participantes cuyos coches tienen una historia por detrás.

Entre los 180 coches participantes, algunos de Portugal y el resto de todos los rincones de España, se encontraba el Rolls Royce Dawn, una serie especial, de Alberto Gallardo, procedente de Zaragoza. «Es uno de los más caros que hay aquí», le decía un padre a su hijo. Y no le faltaba razón puesto que este coche tiene un coste de medio millón de euros, según apuntaba su propietario. «Lo encontré en Alemania y un preparador me cambió las piezas de madera del interior por carbono para que se vea un poco más deportivo. Además, todas las partes de cromado están pintadas de negro», detallaba, al tiempo que accionaba el mecanismo que convierte el coche en descapotable, ante el asombro de un grupo de espectadores que rodeaban esta joya.

A unos metros de allí, estaba expuesto un Lamborghini Urus naranja, que es un SUV deportivo de altas prestaciones, conocido como 'Super SUV' por combinar la funcionalidad de un SUV con el rendimiento de un superdeportivo. su propietario, Ricardo Rubí, de Madrid, tuvo que esperar «dos años y medio» para que se lo fabricaran. «Es un coche muy cómodo para viajar y a la vez deportivo. Lleva unas baterías que le confieren una autonomía de 80 kilómetros para poder circular en modo eléctrico por las ciudades, con lo cual evitamos la contaminación». Además de eso, Ricardo señalaba que su coche tiene una potencia de 800 caballos y un coste aproximado de 400.000 euros.

Junto a estos deportivos, también había una serie de coches clásicos, incluido los seiscientos, que también atrajeron la atención del público. El Renault 5 Turbo de Juanjo Collado, de Santa Cruz de Iguña era uno de ellos. Este coche es el que utilizó en su momento Carlos Sainz en los rallies. «En 1983, Renault pensó en este modelo para las carreras. Como se vendía mucho decidieron fabricar unas cinco mil unidades más». Fue en 2006 cuando este aficionado al motor lo adquirió en Francia. «Ha recibido una mano de pintura y se le ha reparado la carrocería porque tenía algún bollo pequeño. Calculo que cueste 90.000 euros», señalaba Juanjo, que cree que en todo España habrá unos 200 coches similares.

El evento de este sábado ha incluido la tradicional ruta que realizan los participantes por Santander. Según señala su impulsor, «es la actividad que más le gusta a los conductores». De hecho, cuenta a modo de anécdota que alguno han llegado a «enfadarse» por no haber podido formar parte de este paseo que concita a cientos de personas a ambos márgenes de la carretera para sacar fotos y grabar vídeos.

El evento continúa este domingo con otra concentración que tendrá lugar, también desde las 10.00 horas, en el Parque de Cros, en Camargo. Desde ahí todos los participantes partirán hacia Pedreña.

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